Cada día, a las 9 de la mañana, un grupo de funcionarios del Gobierno local de Yakarta, la capital indonesia, marchan por las calles de la ciudad portando un ataúd cubierto de plástico, para concienciar a la ciudadanía del peligro del coronavirus, informa Reuters. También llevan trajes de protección como los usados por los servicios funerarios en los entierros de personas contagiadas. Las procesiones empezaron a finales de agosto y se prevé que duren unas dos semanas